jueves, 4 de septiembre de 2014

Mensaje en una botella


 
Apreciada ....,

La Vanguardia está gestionando su solicitud. Ya no es necesario que llame usted al Centro de Atención al Cliente para obtener una respuesta.
Atentamente,
Tamara Blackman
Moderadora
En Memoria
El Canal de Esquelas de La Vanguardia.com
 

 

Barcelona, 4 de septiembre de 2014
Apreciada Tamara Blackman,

Ayer 3 de septiembre de 2014 a las 12:45 procedí a llamar al Centro de Atención al Cliente de "La Vanguardia" al 902 17 85 85 para solicitar la retirada de la publicación y resolver dicho conflicto, la operadora me mantuvo al teléfono esperando a que me pasara con la persona que lleva el tema y finalmente me solicitó mi nombre y teléfono para poderme llamar en unos instantes. Pasó el tiempo y conmigo nadie se puso en contacto así que volví a entrar en la página web de "La Vanguardia" para intentar encontrar otra dirección de correo  (digital@lavanguardia.es) donde poderme dirigir si no se realizaba la llamada que esperaba.
No fue necesario porque una vez recibido su email  confirmo que "La Vanguardia" está gestionando mi solicitud así que resto a la espera, en breve,  de algún tipo de resolución  sobre este altercado  por parte de "La Vanguardia" como así me lo ha comunicado usted.
Agradecerle todas las gestiones realizadas por su parte.
Atentamente,
....


Amigos, espero que todos estos mensajes en la botella lleguen a buen puerto y que no tarde mucho. Pero de todo esto, encuentro algo en falta, es poder poner una cara a la persona que le ha caído el marrón encima para resolver todo este follón, eso poner una cara, una expresión, unos ojos, una voz y me pregunto ¿qué pensará de todo esto...?
Muchos de vosotros lo habéis hecho, conocidos y no conocidos, como Rowena una amiga de Facebook que no conozco personalmente pero por sus fotos  sí puedo ponerle una imagen de su cara... 


"Tras unas actualizaciones muy personales que alguien ha compartido estos dos últimos días, me ha hecho pensar quizá más de lo que debiera... pero las cosas son como son y a veces hay verdades que resultan molestas, pero no por ello dejan de ser ciertas.
La muerte es algo que tarde o temprano nos tiene que llegar a todos, pero... mientras estamos vivos ¿qué hacemos con las personas a quiénes después vamos a llorar a los cementerios?
Qué nadie crea que estoy pensando en hacer nada que no deba por lo que diré a continuación, ya que no es el caso... sólo es una reflexión.
Pero... a quiénes me conocen personalmente como a quiénes no, sólo les pido que no quiero hipocresía el día que me llegue la hora.
Quiénes de verdad me quieran que me lo demuestren ahora que estoy viva y puedo disfrutarlo con ellos/as, quién me quiera regalar flores... que lo haga ahora que puedo disfrutarlas y no luego para que se sequen y pudran delante de un mármol, pero para quedar bien delante de los demás.
No quiero remordimientos de conciencia por no haber dado un abrazo o una muestra de afecto cuándo pudieron.
Y entonces si lloran... qué no digan que lo hacen por mí, sino por ellos mismos... por todo lo que no hicieron cuándo podían o debían."


Y otra cosa amigos..., encontrado en el Facebook, después de resolver una cosa empezaré otra, necesito cargar baterías.
 
Sí Joan y Montse murieron el mismo día con 25 años de diferencia, ella en un mortal accidente de tráfico, acontecimiento que Joan no superó nunca. Y a su hermana mayor Joan la recordó siempre, eso me consta,

 



http://joangarrido.blogspot.com.es/2007/02/montse.html

Tal es que cuando se acercaba el momento Joan me dijo: "...me gustaría morir el mismo día que mi hermana Montse...", ¡¡¡què jodio!!!, así fue.
És cert Anna, el teu germà no estarà sol, d'això ja se'n carregarà la Montse de la mateixa manera que ho vaig fer jo durant tots aquests maravellosos anys, no com altres...
 
Continuará...

 

 
 
 

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